Hace algunos días, navegando por la internet, se me ocurrió poner en el buscador la palabra GORDOS y encontre un sitio muy interesante llamado gordos.com. Para no hacer el cuento largo, en este sitio pueden encontrar testimonios verídicos de personas con sobrepeso u obesidad y como viven cada minuto de su existencia en este mundo regido por estereotipos y patrones de belleza imposibles... o mínimo alejados de la realidad. Les muestro uno de tantos que, en lo personal, me hizo llorar como pocas veces en mis 25 años.
"La gordura pesa más en el alma que en el cuerpo. A veces se siente mucha tristeza, una tristeza profunda por no ser como los demás quieren que seas. Los gordos nos morimos por ser aceptados y muchas veces nos tenemos que enfrentar al rechazo y a la burla de la gente que no comprende todo lo que luchamos día a día por ser mejores y estar bien.
Estoy segura que alguna vez le has dicho a un gordo que se ponga a dieta justo antes de que se lleve la comida a la boca o te has burlado de la típica gordita bailadora en alguna boda, tampoco dudo que hayas humillado a un gordito en medio de sus jadeos por no poder correr como los demás. Quiero que sepas que todas esas veces has sido culpable de hacerlos sentir tristes, porque te puedo asegurar que en ese momento sintieron un nudo en la garganta pero tuvieron que postergar sus lágrimas para un momento de soledad.
Eso lo hace todo mundo: propios y extraños y no lo hacen por malos, lo hacen por ignorantes, pero igual daña.
El gordo al llevarse la comida a la boca se quiere olvidar se su tristeza, es ignorante del circulo vicioso en el que algún día entró y se está preguntando a si mismo por qué se siente más feliz cuando come. La gordita bailando en la boda está tratando de evadir su realidad, de gritarle al mundo una falsa alegría para evitar que la conmiseren por no ser ella la novia, y además de la carga emocional, debe ignorar lo mucho que le lastiman los zapatos modernos o cuanto escozor le provoca en la piel la faja que debe traer puesta para que le cierre el vestido. El gordito corriendo está haciendo un esfuerzo sobrehumano para poder cumplir la expectativa de los demás y hacer que no se note que la cabeza le está estallando con el esfuerzo. Los tres están sufriendo profundamente y para colmo no entienden nada.
Quiero que a través de este escrito sepas una cosa: a los gordos no nos gusta que se burlen de nosotros pero no lo decimos porque nos da vergüenza y tristeza, y es tanta la tristeza que sería imposible decirlo sin estallar en llanto. Por eso no lo hacemos, por eso fingimos. Porque sería vergüenza sobre vergüenza, tristeza sobre tristeza y eso al final es lo que se acumula y pesa tantos kilos.
Sabemos que no está bien estar así, y luchamos y luchamos y luchamos. A veces podemos, a veces no, pero nunca dejamos de luchar, de verdad queremos ser delgados y no es justo que se nos trate como si estuviéramos instalados en una zona de confort, resignados sin querer hacer nada, porque no es así.
Yo, como la mayoría de de los gordos he probado de todo, gastado mucho dinero y me he hecho muchas ilusiones, estoy luchando y quiero tener esperanzas. Todos los días busco motivos para sacar fuerzas y tener ilusiones porque vivir así no es vida y a veces siento ya no puedo más."
Duro, ¿verdad?. A final de cuentas quien tiende a burlarse de otra persona es porque no puede soportar la diversidad. Atacamos aquello que es diferente a nosotros, que es extraño, que es "el OTRO"... pero, observa a tu alrededor. ¿TODAS LAS PERSONAS QUE AMAS SON IGUALES A TI?. Estoy segura que entre tus seres queridos hay MINIMO uno que posee el defecto por el cual te burlas de otros.
Sé que esto no es feminismo, ni defensa de la mujer en su totalidad. Pero considero importante el tema, ya que si pretendemos unirnos como género valdría la pena primero eliminar otras formas de discriminación que nos impiden formar un frente unido. Sólo pido una cosa: la próxima vez que tengas el impulso de burlarte de una chica gorda recuerda que debajo de todos esos kilos hay una mujer como tú (y si eres hombre piensa que hay un ser humano COMO TU) con sueños, objetivos, sentimientos, etc. y que si fuera tu madre, tu hermana, tu hija, tu amiga, tu pareja no la dañarías de esa manera.
"La gordura pesa más en el alma que en el cuerpo. A veces se siente mucha tristeza, una tristeza profunda por no ser como los demás quieren que seas. Los gordos nos morimos por ser aceptados y muchas veces nos tenemos que enfrentar al rechazo y a la burla de la gente que no comprende todo lo que luchamos día a día por ser mejores y estar bien.
Estoy segura que alguna vez le has dicho a un gordo que se ponga a dieta justo antes de que se lleve la comida a la boca o te has burlado de la típica gordita bailadora en alguna boda, tampoco dudo que hayas humillado a un gordito en medio de sus jadeos por no poder correr como los demás. Quiero que sepas que todas esas veces has sido culpable de hacerlos sentir tristes, porque te puedo asegurar que en ese momento sintieron un nudo en la garganta pero tuvieron que postergar sus lágrimas para un momento de soledad.
Eso lo hace todo mundo: propios y extraños y no lo hacen por malos, lo hacen por ignorantes, pero igual daña.
El gordo al llevarse la comida a la boca se quiere olvidar se su tristeza, es ignorante del circulo vicioso en el que algún día entró y se está preguntando a si mismo por qué se siente más feliz cuando come. La gordita bailando en la boda está tratando de evadir su realidad, de gritarle al mundo una falsa alegría para evitar que la conmiseren por no ser ella la novia, y además de la carga emocional, debe ignorar lo mucho que le lastiman los zapatos modernos o cuanto escozor le provoca en la piel la faja que debe traer puesta para que le cierre el vestido. El gordito corriendo está haciendo un esfuerzo sobrehumano para poder cumplir la expectativa de los demás y hacer que no se note que la cabeza le está estallando con el esfuerzo. Los tres están sufriendo profundamente y para colmo no entienden nada.
Quiero que a través de este escrito sepas una cosa: a los gordos no nos gusta que se burlen de nosotros pero no lo decimos porque nos da vergüenza y tristeza, y es tanta la tristeza que sería imposible decirlo sin estallar en llanto. Por eso no lo hacemos, por eso fingimos. Porque sería vergüenza sobre vergüenza, tristeza sobre tristeza y eso al final es lo que se acumula y pesa tantos kilos.
Sabemos que no está bien estar así, y luchamos y luchamos y luchamos. A veces podemos, a veces no, pero nunca dejamos de luchar, de verdad queremos ser delgados y no es justo que se nos trate como si estuviéramos instalados en una zona de confort, resignados sin querer hacer nada, porque no es así.
Yo, como la mayoría de de los gordos he probado de todo, gastado mucho dinero y me he hecho muchas ilusiones, estoy luchando y quiero tener esperanzas. Todos los días busco motivos para sacar fuerzas y tener ilusiones porque vivir así no es vida y a veces siento ya no puedo más."
Duro, ¿verdad?. A final de cuentas quien tiende a burlarse de otra persona es porque no puede soportar la diversidad. Atacamos aquello que es diferente a nosotros, que es extraño, que es "el OTRO"... pero, observa a tu alrededor. ¿TODAS LAS PERSONAS QUE AMAS SON IGUALES A TI?. Estoy segura que entre tus seres queridos hay MINIMO uno que posee el defecto por el cual te burlas de otros.
Sé que esto no es feminismo, ni defensa de la mujer en su totalidad. Pero considero importante el tema, ya que si pretendemos unirnos como género valdría la pena primero eliminar otras formas de discriminación que nos impiden formar un frente unido. Sólo pido una cosa: la próxima vez que tengas el impulso de burlarte de una chica gorda recuerda que debajo de todos esos kilos hay una mujer como tú (y si eres hombre piensa que hay un ser humano COMO TU) con sueños, objetivos, sentimientos, etc. y que si fuera tu madre, tu hermana, tu hija, tu amiga, tu pareja no la dañarías de esa manera.
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